viernes, 31 de julio de 2015

Participación de los Pueblos Originarios en el Taller de ONU-REDD

En el marco del programa ONU-REDD, se realizó un encuentro entre los días trece y diecisiete del mes de Julio en la ciudad de Buenos Aires. Las Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios del ENOTPO, convocadas a través de la Dirección de Pueblos Originarios y Recursos Naturales (SAYDS), participamos para dar cuenta de nuestros derechos con respecto a los territorios que habitamos ancestralmente y de las obligaciones que tanto el Estado, como las ONG’s, los privados y cualquier otra entidad deben cumplir respecto a cualquier acción que afecte directa o indirectamente a nuestros territorios y bosques nativos.

El Programa ONU-REDD es una iniciativa de las Naciones Unidas para “reducir las emisiones de la deforestación y la degradación de bosques en países en desarrollo”. Desde el programa se plantea “el involucramiento de las partes interesadas y de los protectores de los bosques en las etapas del diseño e implementación del programa para que sean estos actores los que resulten beneficiados por proteger sus bosques”.

Estuvieron presentes, además, representantes de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable (Dirección de Pueblos Originarios, Dirección de Cambio Climático, Dirección de Bosques), la Dirección de Pueblos Originarios (MAGYP), la Dirección de Afirmación del Derecho Indígena (INAI), Dirección de asuntos ambientales de Cancillería, INTA (Salta), Subsecretaría de Bosques (Chubut), participantes de distintas universidades (Comahue de Neuquén, Universidad Nacional de Córdoba), representantes de ONGs (Fundación Torcuato Di Tella, Fundación Agreste, Fundación de Altos Estudios Ambientales de San Luis), referentes de Pueblos Originarios de diversas organizaciones, representantes de agencias internacionales (FAO, PNUD, PNUMA, REDD+), entre otros.


Durante la jornada se realizó una mesa de presentación del programa y de los participantes para luego pasar a trabajar en cuatro talleres que abordaron la problemática desde diferentes aspectos. Los temas tratados fueron:

* Preparación de la Estrategia Nacional REDD+ (EN REDD+)

* Construcción del Nivel de Referencia Nacional de Emisiones Forestales.

* Fortalecimiento del Sistema Nacional de Monitoreo de Bosques (SNMB)

* Desarrollo del Sistema de Información sobre Salvaguardas (SIS).

En cada una de estas instancias hicimos escuchar nuestra voz dejando en claro nuestra postura respecto a los distintos temas. La participación plena de los Pueblos Originarios en el programa ONU-REDD es un derecho que debe ser respetado y cumplido, es por ello que desde las organizaciones territoriales se hizo especial hincapié en la importancia de realizar un proceso adecuado de Consulta para el Consentimiento Libre, Previo e Informado. En este marco, durante la segunda jornada, se dio lugar a la presentación del “Protocolo de Consulta Previa Libre e Informada”, la cual estuvo a cargo de autoridades tradicionales y técnicos pertenecientes a nuestros pueblos. 

El Protocolo de Consulta es una herramienta construida por el ENOTPO que tiene como fin establecer el procedimiento adecuado para la Consulta a los Pueblos Originarios y, de este modo, facilitar el diálogo intercultural con el Estado y/o particulares para evitar el desarrollo de posibles conflictos que afectan a los Pueblos. El mismo fue repartido entre todos los participantes presentes, y desde las reuniones realizadas durante el 2014 fue incluido como anexo a la Estrategia Nacional.





Otro punto de gran importancia y debate en el taller fue la incorporación de delegados de los Pueblos Originarios al Consejo Asesor, ya que este tema había sido discutido y acordado en las reuniones previas pero nunca se llevó a cabo, quedando vacante la participación de los Pueblos Originarios en ese espacio. En este sentido, se renovó el acuerdo para que las Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios tengan participación activa como parte de dicho Consejo.

Por otro lado, se abordó el tema del cumplimiento de la Ley de Bosques y de la falta de consulta a los Pueblos Originarios en la aplicación de la misma. Cuando se habla de Bosques Nativos, se está hablando de Territorios Originarios, de una relación ancestral entre los Pueblos Originarios y el bosque, de saberes tradicionales propios de los Pueblos que garantizan el cuidado y uso sustentable de los bienes naturales de los bosques, y de la importancia central de respetar el Derecho de los Pueblos Originarios sobre sus territorios para la conservación y protección de los Bosques Nativos.

En este sentido se remarcó la necesidad de respetar el derecho a la posesión y propiedad comunitaria, y regular la entrega de otras aptas y suficientes para el desarrollo humano, según lo establecido en la Constitución Nacional (Art. 75, Inc. 17 y 22). Asimismo, de acuerdo a lo establecido en el artículo 8j del Convenio de Diversidad Biológica, se debe respetar los conocimientos, las innovaciones y las prácticas de los Pueblos Originarios para garantizar el desarrollo con identidad, desde nuestra propia cosmovisión, conocimientos tradicionales, y orientado al “Buen Vivir”. De igual modo, promover dichas prácticas hacia toda la sociedad y garantizar que se compartan equitativamente los beneficios que de ellas se deriven.




Entre los aportes que surgieron del debate se pueden destacar los siguientes puntos como “Recomendaciones hacia la implementación del Programa ONU – REDD”:
  • Incorporación de los Pueblos Originarios al Consejo Asesor. 
  • Es necesario fortalecer los procesos de consulta, respetando los protocolos de pueblos originarios e incorporando las distintas cosmovisiones. 
  • Conformar una mesa de diálogo sobre salvaguardas con pueblos originarios, realizando encuentros por regiones y con la finalidad de recoger las distintas voces, respetando la diversidad de cada territorio y de cada pueblo. 
  • Los espacios de discusión deberán conformarse de manera interdisciplinaria e intercultural. Deberá incorporarse al diálogo los saberes tradicionales y saberes técnicos ancestrales de pueblos originarios. Se deberán generar conocimientos comunes en torno a los bosques. 
  • El dialogo debe respetar la noción de territorio (y no “tierras”), la propiedad comunitaria, el concepto de “Buen Vivir” y la concepción de pueblos originarios como sujetos de derechos. 
  • Fortalecer el desarrollo de redes conformadas por los pueblos originarios participantes de la estrategia REDD. 
  • Se deberán realizar recomendaciones que propendan a fortalecer el marco normativo en materia de derecho indígena, por medio de nuevas normas que cubran vacíos legales e impulsar el cumplimiento de la normativa nacional e internacional ya vigentes. 
  • Trabajar sobre la necesidad de fortalecer jurídicamente la propiedad comunitaria y que los procesos de consultas sean vinculantes y previos a cualquier decisión.. 
  • Los espacios de encuentros deberán contar con traductores. 
  • No igualar bosques y pobreza, sino adoptar la concepción de pueblos originarios sobre Buen Vivir. 
  • Articular ONU REDD con el Observatorio Social de Bosques de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable y el Observatorio de la biodiversidad de SAyDS.
  • Incorporar el agua y los servicios proporcionados por los bosques como parte de la estrategia de conservación, garantizando el acceso al agua saludable y suficiente.



El Cacique Pancho Chaile desde el Hospital: “Soy un preso político”


En diálogo exclusivo con APA!, el líder de la Comunidad India Quilmes, que se encuentra detenido desde el 6 de junio pasado, explicó su lucha por las tierras, denunció que fue golpeado cuando fue llevado preso, las dificultades que atraviesan los pueblos indígenas y la esperanza de que el Estado provincial finalmente les reconozca lo que es propio: los terrenos que ocupan ancestralmente.

Los hospitales son lugares fríos, oscuros, donde la muerte ronda los pasillos. Las paredes blancas, descascaradas por la humedad y manchadas por el abandono, disimulan una falsa pulcritud. Los rostros de las visitas, cansados, anónimos, parecen siempre esperar. El de Monteros no es la excepción.

Es de noche y una leve brisa nos recuerda que es invierno. Sin pedir permiso nos inmiscuimos, disimulando nuestra presencia. Un cartel exige respetar los horarios de visitas, que por lejos estamos incumpliendo. Caminamos con la seguridad de quién tiene permitido estar donde está. Al final del camino, entramos a una habitación donde tres pacientes esperan para una pronta cirugía. Una policía custodia la habitación al pie de una cama. De la cama de Francisco Chaile. De Pancho, el cacique de la Comunidad India Quilmes.
 
El 11 de junio, La Gaceta publicaba una nota cuyo sugestivo título rezaba ‘A los tiros, intentaron tomar posesión de las ruinas de Quilmes’ y en la bajada explicaba que ‘una banda ingresó armada el sábado y atacó a los administradores’. Para el centenario diario, lo ocurrido cuatro días atrás se trataba de un asalto disimulado por la presencia del ‘ex’ cacique Francisco Chaile. Las únicas y privilegiadas fuentes de la nota eran policías. Sin nombres, sin cargos. Solo ‘fuentes policiales’.

Al otro día, el diario publicaba una Editorial, reservada para casos de importancia social. La empresa nunca se había pronunciado sobre un conflicto indígena de esta manera. Nuevamente se mencionaba a Chaile como ex líder de la Comunidad y se reforzaba la hipótesis de que ‘se habría tratado de un intento del ex cacique de quedarse con la administración del predio’. Toda la cobertura de días posteriores hará hincapié en la disputa interna, sin llegar al verdadero núcleo de la cuestión: quiénes son los verdaderos y legítimos dueños de las tierras.

Francisco Chaile nos recibe en su habitación compartida del hospital de Monteros. En pocos días será sometido a una cirugía de vesícula, que se pospuso por una infección urinaria. Está tranquilo, relajado. “Ya varias veces me han operado”, nos dice. Tiene la piel curtida, no solo por sus 64 años recién cumplidos, sino por una lucha que le ha ocupado los últimos 40 años de su vida. “Estamos defendiendo nuestros derechos. Los pueblos indígenas estamos demostrando que realmente las cosas hay que lucharlas porque sino no vamos a conseguir nada”.

Está contento porque siente que su pueblo se despertó, porque han podido romper el silencio pues su detención ha hecho mucho ruido. “En La Gaceta nunca pude salir ni haciendo cosas buenas. Siempre cuando uno va a buscar alguna nota, no le dan bolilla. Ahora me hacen aparecer como un tremendo malviviente. Si Tata Dios y la Pacha me dan tiempo, voy a demostrarles que no es así”.

Su anhelo, lo que lo motiva a seguir adelante, es “recuperar lo que estamos perdiendo”, sus tierras, esas en las que se han criados sus abuelos, sus padres, donde han desarrollado sus vidas, han conocido amores y dolores, donde se han ilusionado y decepcionado, donde han pasado hambre y atracones.

“Mi tierra que tengo es la que ha cultivado mi padre. No tengo deseo de adueñarme de nada, sino de acompañar hasta donde más pueda a mi gente”.


El 6 de junio Pancho Chaile fue detenido junto a otras 12 personas. Fueron acusados por ‘robo agravado, uso de armas y amenazas’, motivos por los cuales se les dictó prisión preventiva, usualmente reservada para causas graves o donde el acusado pueda escaparse. A pesar de su delicado estado de salud, el juez Mario Velázquez del Juzgado de Instrucción del Centro Judicial de Monteros rechazó el pedido de andhes para que Chaile cumpla la medida en su casa, aunque lo autorizó a internarse hasta tanto se le otorgue el alta hospitalaria cuando deberá ser alojado nuevamente en la comisaria monteriza.

“Soy enfermo yo. Tengo una enfermedad del riñón. Quería contarle eso al médico (judicial), que cada tanto me agarran unos ataques. Dos o tres días que duermo en el suelo me enfermo. Cuando llegué al hospital, no podía dar vuelta la cama. Era por la vesícula, tengo un quiste de 10 centímetros. Tenía la vesícula muy inflamada. Lo más grave es lo del riñón, que hace muchos años tengo ataques”, nos relata Pancho sin desánimo, como quién cuenta algo por compromiso.

Pero reconoce que en la cárcel “la pase bastante mal “porque no tenía atención médica. Aunque tiene confianza en que podrá revocar la prisión preventiva, dice que “si tengo que volver al calabozo, no sé si volverá a chaparme la enfermedad”.

Pancho es un optimista sin cura. Cada palabra se afirma sobre la premisa del triunfo de los justos. Por eso está “con mucho ánimo” aunque preocupado mucho por “la familia de los chicos que están presos”. A sus hermanos comuneros les pide que no se callen en las marchas. Sabe que, aunque el hospital insista, el silencio no es salud.

La Comunidad India Quilmes se encuentra en la provincia de Tucumán,en el valle de Santa María, situado entre las sierras de El Cajón y del Aconquija. Pertenecen a ella aproximadamente 600 familias (más de 2.500 personas) de 14 comunidades de base. De 1973 datan los primeros intentos de reorganizar la Comunidad, en aquél momento el nombre de Federación Indígena. La Dictadura cívico-militar, que contó con el respaldo de la misma Iglesia Católica que avaló el genocidio indio realizado por los colonizadores europeos en América, obturó todos los procesos sociales organizativos que ponían en peligro sus intereses. La CIQ no fue la excepción. Quedó desmantelada.

Con el regreso de la democracia institucional, la Comunidad vuelve a organizarse, con el principal objetivo de lograr la personería jurídica, cuestión que logran en 1984 con el reconocimiento de los Estados nacional y provincial. Todos esos años, negros para historia del país, encontraron a Pancho Chaile recorriendo los valles para conocer los problemas de sus hermanos comuneros. Esa experiencia le sirvió para empezar a contactarse con organizaciones indígenas de Chaco, de Buenos Aires y otros lugares, preparándose para pelear por una ley nacional que los protegiera. Así lograron que el alfonsinismo promulgara la ley 23.302 de apoyo a las comunidades aborigenes. “Era un instrumento con qué defendernos”, nos explica.

En medio de ese proceso de reorganización, se cumplían 500 años del genocidio contra los pueblos originarios. La CIQ organizó un acto con la presencia de más de 500 personas en el año 1992, para repudiar la llegada de Colón a nuestra América. También ese año, Francisco Chaile es elegido como presidente de la Comunidad. En 1994, la Constitución Nacional, que fue reformada como fruto del Pacto de Olivos entre el entonces presidente Carlos Menem y el ex presidente Raúl Alfonsín, incluye en su artículo 75 el reconocimiento de la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos, lo que refuerza la lucha de las comunidades de todo el país.

En el año ’97, la comunidad empieza a discutir su forma organizativa. La búsqueda tenía que ver con referenciarse en algo que tuviese que ver más con la historia de los Quilmes, donde haya un cacique y un consejo de Delegados donde estén representadas las 14 bases que contiene la Comunidad. Siempre con la premisa de defender las tierras cuando se metía “gente de afuera”. A partir de acordar la forma de organizarse, se hace una asamblea un año después, donde se postulan cuatro candidatos. Pancho es elegido cacique de la Comunidad, elección que volverá a ganar en el 2004, 2008 y 2013. Aunque siempre ganaba por amplia mayoría, comienza a gestarse una minoría opositora dentro de la propia comunidad, encabezada por Santiago Santos, quien a la larga se aliaría con empresarios y políticos en contra de sus propios hermanos.

Fortalecer la organización interna es lo que permitió a la Comunidad India Quilmes avanzar en recuperar y ganar lo que es propio. En ese contexto se da la lucha por la restitución del sitio Arqueológico Ruinas de Quilmes o Ciudad Sagrada, que desde 1992 hasta el 2007 estuvo en manos del empresario Héctor Cruz.


El día que cayó preso, Francisco Chaile tenía como meta recuperar la Ciudad Sagrada de Quilmes, que había sido nuevamente usurpada el 7 de marzo por Santiago Santos con el apoyo de Cruz. Junto a otras 9 personas, se tomaron dos remises con la idea de ir al sitio y “pegarles” a los usurpadores “una susteada, una gritada, una apurada. Siempre mi intención ha sido no pegar, no matar no hacer ningún salvajismo. Lo que sí nada más un susto”.
Sabían que a la hora en que iban a ir no quedaba prácticamente nadie en el lugar. La llegada del ocaso disipaba los turistas y también a los empleados.

Cuando llegaron al lugar, uno de los autos quedó en la entrada y el otro se fue para arriba, a unos 300 metros de distancia. Aunque no lo sabían entonces, ahora no tienen dudas. “Nos han hecho una cama. Ya estaba hecha y fuimos a caer. No llevamos más gente para no hacer ruido. íbamos a llamar más gente cuando ya estemos ahí. Pero no lo logramos. Rápido llegó la cana”.

Todo fue en cuestión de minutos. “Parece que la tenían escondida a la gendarmería, porque no había tiempo para llegar de Colalao del Valle”, donde está asentada la base de la fuerza. Pancho y los que lo acompañaban quedaron rápidamente reducidos.

Sospecha que tenían los celulares intervenidos o tal vez alguien del grupo “cantó la movida”. No imaginaba que un desesperado intento de recuperar las tierras de su comunidad lo llevaría a la cárcel. “Nos acusan de haber estado armados, haber robado, tentativa de muerte, robo en banda. La directiva no era robar, sino ahuyentarlos, corretearlos a los de ahí. Y habían estado esperándonos escondidos. Yo no estaba armado”.

Para las comunidades, la justicia siempre tarda en llegar. El cacique es sabio. “Esto de alguna manera nos hace poner de pie. Desgraciadamente, tiene que haber un inconveniente para que uno salga a la calle, para que uno vea que nuestro propio destino hay que lucharlo para conseguirlo”.

En 1992, el entonces gobernador Ramón ‘Palito’ Ortega cedía la concesión del sitio Arquelógico al empresario Héctor Cruz, por un período de 10 años. Sin autorización de la comunidad ni estudios de ninguna índole, Cruz construyó en el lugar un hotel con piscina incluida. Vencido el plazo del contrato, la Comunidad India Quilmes, fortalecida y reorganizada, presentó un amparo ante la justicia exigiendo la restitución del sitio a sus legítimos dueños. Aunque el amparo fue favorable, demoraría 5 años en ejecutarse.

“En julio del 2007 sale un decreto del gobernador Alperovich para desalojarlo al señor este del sitio Arqueológico Ruina de Quilmes. Hacen dos intentos muy light, con poca fuerza de parte de la policía y no los desalojan. Cuando conocimos este decreto y que no pasaba nada, hicimos cortes de ruta en la entrada del sitio. El corte se hace el 28 de noviembre. El 13 de diciembre, se presenta el fiscal de Estado de Tucumán acompañado por 50 efectivos de la policía y se lo desaloja al hombre (a Cruz)”.

A partir de allí, comenzaría una nueva etapa de negociación entre la CIQ y el Estado provincial para definir cómo gestionar el sitio. Como el Ente Turismo no proponía ninguna salida viable, la Comunidad continuó con los cortes de ruta hasta el 9 de enero del 2008, cuando recuperaron sus tierras sin pedirle permiso a nadie.

Los siguientes años transcurrirían entre la novedosa gestión del sitio por parte de sus legítimos dueños y una oposición interna encabezada por Santiago Santos que, enojado por las sucesivas reelecciones de Chaile como cacique, se iría aliando con el empresario Cruz y políticos desde las sombras. “Con la plata que nos daba el sitio, ayudábamos a la gente, hacíamos trabajos allí, porque cuando lo agarrábamos estaba bastante deteriorado. Permanentemente había un tipo de ayuda social hacia las distintas comunidades de base que tenemos”, nos explica el cacique.

Cuando en el 2013, Francisco Chaile es nuevamente refrendado por sus hermanos como líder de la comunidad, Santos y Cruz deciden usurpar la rebautizada Ciudad Sagrada de Quilmes con el apoyo de entre 30 y 40 personas. “Conversando con la gente, vi que ir a una guerra no era la solución. Pongo un amparo a la simple tenencia que me sale favorable. Recién se desaloja el 5 de marzo del 2014”, recuerda Chaile.

Sin embargo, dos días después los usurpadores volverían. “Cayeron 70 personas con tumberas, fierros, cadenas, látigos y masacran a esas 8 personas de la comunidad (que habían quedado custodiando el lugar) y ocupan de nuevo el sitio. Sergio Condorí es herido de bala y también hicieron otros disparos al aire. A algunos han visto quienes eran y a otros no los han reconocido porque tenían los rostros tapados. Pusimos la denuncia y empezamos a caminar atrás de esa denuncia durante un año y cuatro meses, hasta llegar a la situación mía”.


El hospital de Monteros se pone cada vez más frío. El preludio de una cirugía pone a prueba el temple de hasta el más valiente. Pancho sabe que no hay nada para temer. Es la confianza en sus propias fuerzas lo que lo sostiene.

Le preguntamos por qué está preso. “Pienso que porque les molesto. Durante 14, 15 años tuve esa oposición que fue financiada por ese señor Cruz”, lanza con simpleza.

En realidad, no se le escapa que el conflicto real es la posesión de las tierras, esas que vienen reclamando hace años, que les quitaron sin pedirles permiso, que les amenazan con sacarlos. Hace dos años culminaron con el relevamiento territorial ordenado por la ley 26.160 y reclaman como propias cerca de 70 mil hectáreas. Pero están elaborando un proyecto para que las tierras fiscales que están dentro de los terrenos indígenas vuelvan a las comunidades. Son más de 7 mil hectáreas, que incluirían el Sitio Arquelógico o Ciudad Sagrada de Quilmes.

La voz de Chaile se va poniendo grave. Son muchos los interesados en que los ‘indios’ fracasen. El despojo histórico del que han sido víctimas se perpetúa en cada desalojo, en cada usurpación, en cada comunero preso. Sabe que sus tierras son atractivas para empresarios y políticos que son empresarios o que se alinean con empresarios. Es que esos terrenos son aptos para las viñas, los nogales y son muchas hectáreas que están vacías porque la comunidad no tiene capital para hacer inversiones.

“Tenemos que ver que el Estado o quien fuera nos brinde recursos pero que no nos la quiten porque vamos a ser unos parias en nuestras propias tierras”, reclama Pancho.
A pesar de que tienen una cédula real de 1716 que les reconoce la posesión del territorio en el que aun vivían los Quilmes y los Amaichas, no cree que la legitimidad surja de un papel. “La mayoría hemos nacido en la tierra. Y nacer en la tierra tiene muchísimo valor. Más que cualquier papel. Yo nací en esta tierra. Ahí nació mi abuelo, mi papá. ¿Cómo puede venir a reclamarme mi tierra un tipo que ha nacido en otro lado? Andá a reclamar adonde has nacido vos”, dice casi gritando.

El hospital será su cárcel hasta que esté le den el alta. Lejos de su pueblo, aprovecha la charla para mandarle un mensaje a su comunidad. “Aquí hay muchos factores que vienen jugando en contra de nosotros, desde hace muchos años. Ahora se sabrá quién es quién. Por otro lado, veo que estamos más cerca de solucionar nuestros problemas. No solo de la Comunidad India Quilmes, sino de otras comunidades hermanas que están apoyando la lucha. Esto de alguna manera nos hace poner de pie. Desgraciadamente tiene que caer preso un hermano para que se destape la olla. Mi anhelo es recuperar lo que estamos perdiendo, que son 
nuestras tierras”.

Fuente: http://apaprensa.com.ar/el-cacique-pancho-chaile-desde-el-hospital-soy-un-preso-politico/


lunes, 27 de julio de 2015

“No habrá nube que tape el sol que estamos buscando”. ¡Hasta siempre Eulogio!


Eulogio Frites nos dejo el viernes pasado. Fue un hermano nacido en territorio de la comunidad Varas, Palca de Aparzo, en Humahuaca, Jujuy. Tempranamente se hizo un camino en el campo del derecho y en especial el de los Pueblos Originarios. La UBA va a ser la facultad que lo forja y que a la vez comienza a ser interpelada ante la presencia de un originario en sus claustros.

Como un visionario y justiciero de las luchas de sus hermanos, generó una fuente de esperanza en la lucha jurídica de los Pueblos Originarios. Con la fuerza de un guerrero, hijo del padre sol y la madre tierra, abrió camino, fue creador y estratega. Lapicera en mano fue plasmando las ideas y dándolas a conocer con su máquina de escribir, abriéndose paso en los pasillos de Tribunales, en el Congreso, y en los Ministerios. 

Su sonrisa inolvidable era su sello personal, y era muy profesional, el Dr. Frites daba cátedra, sus alocuciones eran extraordinarias y conmovían a los auditorios más fríos, duros.

Con la humildad de los grandes, para atender a sus hermanos, con profundo amor por los Pueblos, y convencido de que valorando nuestra cultura y con el aporte de la ciencia universal, saldríamos adelante.

Con sus penurias y sus fuerzas empujaba hacia adelante, y daba su ejemplo cuando demostraba su amor por su familia, esposa, hijos y nietos. Su admiración por su madre y padre, y su historia de vida, de cara al la oligarquía Salteña de los Patrón Costa. 

La historia oral también era su pasión, como el derecho. Recordaba a los grandes caciques, Taigoyic, Meguesoxochi, Calfucura, Viltipoco, y las batallas de Quera, entre otros.

Un jurista que marcó un antes y un después. No lo detenía la adversidad, y avanzaba ya sea desde las letras, en forma de canto, con el retumbar de una caja, en el quichua de su prosa, fue abriendo caminos a hermanos y hermanas en el camino del derecho de los Pueblos Originarios. 

Te han sembrado Hermano Dr. Frites, desde los cinco continentes te recuerdan y te consideran un padre, un maestro. Se van a concentrar todos los reconocimientos, de todos los Pueblos Originarios, y la Pachamama te recibirá en su seno. 

“No habrá nube que tape el sol que estamos buscando”. 

Eulogio Frites, ¡Hasta siempre!

NI OLVIDO, NI PERDÓN. RESTITUCIÓN!


En su reciente visita oficial al Estado Plurinacional de Bolivia, el Papa Francisco realizó una serie de declaraciones en su discurso que generaron una fuerte repercusión en la opinión pública mundial. Uno de los pilares de esta proclama se basó en el pedido de perdón en nombre de la Iglesia “por los crímenes cometidos contra los Pueblos Originarios durante la llamada conquista de América”, conquista llevada a cabo con la espada y con la cruz. Muchos sectores, de distintas extracciones, se han hecho eco de esto, catalogándolo como una conquista sin precedentes en el reconocimiento y visibilización de la lucha de los Pueblos Originarios en el continente.

Frente a esta situación sostenemos que la reparación histórica no puede quedar meramente en una declaración o pedido de perdón, sino por las acciones que conllevan las palabras. Sumado a ello, el Papa instó a "devolverles a los pobres y a los pueblos lo que les pertenece" y consideró que "la propiedad, muy en especial cuando afecta los recursos naturales, debe estar siempre en función de las necesidades de los pueblos". Es en este sentido que la Iglesia, la cual se ha instalado históricamente en la región como socia plena y cómplice de la apropiación territorial y cultural de los Pueblos Originarios de la actual América, debería ser la primera en llevar a cabo la devolución de los territorios usurpados desde hace siglos para darle real entidad a sus palabras.

La misión evangelizadora emprendida en 1492 por la Iglesia Católica significó para los Pueblos Originarios el inicio de un largo proceso de apropiación territorial, el despojo de nuestra identidad, la prohibición de nuestros idiomas y creencias, la ruptura de nuestras instituciones políticas y sociales, el asesinato de nuestras autoridades tradicionales, el sometimiento a la esclavitud y el saqueo de nuestros bienes naturales. En los primeros 150 años de la conquista se registra un ingreso a las arcas de la corona española de 185.000 kilos de oro y 16.000.000 millones de kilos de plata, todos ellos producto del trabajo esclavo de los pueblos y naciones originarias en América. El genocidio de más de 100 millones de hermanas y hermanos fue promovido y justificado por la “Santa” Iglesia y los Reyes Católicos en nombre de la “civilización”. El genocidio y etnocidio cometido en América no puede seguir invisibilizado y negado.

Como Pueblos Originarios preexistentes en América entendemos que la Iglesia como institución debe reparar el ultraje a siglos de opresión e imposición cultural sobre nuestros territorios y retirar sus tropas evangelizadoras, para comenzar luego un camino de diálogo intercultural que permita generar los vínculos necesarios de convivencia y de respeto mutuo

Hoy los Pueblos Originarios estamos de pie y conservamos nuestras propias instituciones, nuestra propia espiritualidad y nuestra simbología. Somos culturas vivas y dinámicas, estamos organizados y no necesitamos mediadores ni voceros ajenos. Es por ello que rechazamos firmemente el pedido de audiencia con el Papa solicitado por el Encuentro de Coordinación Nacional del Equipo de Pastoral Aborigen (Endepa) con el objetivo de “informar sobre la realidad de los Pueblos Originarios de Argentina”. Somos Sujetos de Derecho con voz propia y no queremos que nunca más la Iglesia hable por nosotros. Asimismo consideramos que pedir al máximo representante de la Iglesia Católica su intervención en nuestros asuntos es realmente un retroceso y una continuidad de la campaña COLONIZADORA Y EVANGELIZADORA que atenta contra nuestras propias pautas culturales e instituciones. 

El slogan que ha sostenido la Iglesia desde hace siglos de ser “la voz de los sin voz” ya no puede sostenerse más, especialmente en este contexto particular de los Pueblos Originarios en el continente, donde venimos afianzando y construyendo día a día el fortalecimiento de nuestra organización y de nuestra capacidad para incidir en los distintos ámbitos que nos competen. Tomar posición y rechazar estas intromisiones ajenas a nuestras prácticas forma parte de la aplicación de nuestro Derecho a la AUTONOMÍA y a la IDENTIDAD, derechos inalienables que no vamos a negociar ni delegar en ningún sector.

viernes, 24 de julio de 2015

PRONUNCIAMIENTO DEL ENOTPO - JULIO 2015: REPUDIAMOS LOS HECHOS DE VIOLENCIA CONTRA LOS PUEBLOS ORIGINARIOS Y EXIGIMOS POLÍTICAS PÚBLICAS INTERCULTURALES PARA GARANTIZAR NUESTRA SEGURIDAD TERRITORIAL Y DERECHOS HUMANOS COLECTIVOS

 

Desde el Encuentro Nacional de Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios (ENOTPO) condenamos los numerosos sucesos de violaciones a los derechos de los Pueblos Originarios y sus comunidades acaecidos en este último tiempo, entre ellos:
  • La persecución y criminalización del Pueblo Mapuce por parte de la justicia provincial ante la recuperación de territorios usurpados por Benetton en Vuelta del Río, Cushamen (Chubut); 
  • Las amenazas de desalojo de la Comunidad Gallardo del Pueblo Weenhayek a manos del terrateniente Velarde en Embarcación (Salta); 
  • El intento de desalojo de la Comunidad Diaguita Kallchakí “El Churcal” de la Nación Diaguita en Salta por intereses inmobiliarios de la empresa Ecovista; 
  • El conflicto del lof Mapuce Prane por la ocupación de su territorio por parte del Ejército Nacional; 
  • El robo y apropiación del patrimonio natural y cultural del Pueblo Tastil, Salta;
  • La instalación inconsulta del gasoducto NEA que atraviesa los territorios de los Pueblos Wichi, Pilagá, Chorote, Guaraní , Weenhayek, entre otros, en Formosa y Salta;
  • La detención ilegítima del Cacique Chaile de la Comunidad India Quilmes de la Nación Diaguita en Tucumán, quién una semana antes había sido ratificado nuevamente como autoridad por su comunidad, y fue detenido sin ningún tipo de pruebas en un confuso operativo policial;
  • Paradójicamente, también en la provincia de Tucumán, el terrateniente usurpador Darío Amín y los ex-policías Humberto Gómez y José Valdivieso, asesinos de la autoridad Diaguita Javier Chocobar, luego de casi 6 años del asesinato siguen libres y el Pueblo Chuschagasta de la Nación Diaguita sigue esperando justicia. 
Estos son algunos de una larga lista de hechos de violación de los derechos colectivos, territoriales y humanos de los Pueblos Originarios que se suceden impunemente en nuestros territorios.

Movilización de la Comunidad Colalao de la Nación Diaguita tras el desalojo de 21 familias.
Desalojo de 21 familias de la Comunidad Colalao de la Nación Diaguita, Tucumán.
Corte de ruta ante desalojo del Pueblo Wichi en Salta.
Restitución de los territorios usurpados por Benetton al Pueblo Mapuce
La comunidad "árbol solo" del Pueblo Wichi, Salta, se ve afectada por el paso del gasoducto NEA.
La comunidad "Pencole" del Pueblo Pilagá, Formosa, se ve afectada por el paso del gasoducto NEA.


Estos lamentables hechos son especialmente preocupantes en un Estado que es ejemplo internacional en lo que respecta a las políticas de reparación de crímenes de lesa humanidad ocurridos durante la última dictadura cívico-militar. Los Pueblos Originarios que formamos parte del ENOTPO hemos acompañado y celebrado con firmeza y convicción estos avances por el coraje político y la determinación ideológica que las mismas implican. Sin embargo, los Derechos Humanos colectivos de los Pueblos Originarios siguen siendo una deuda de esta década.


Daños ocasionados por el Rally Dakar
Movilización en apoyo al Pueblo Tastil ante el ataque del terrateniente usurpador Jovanovic.
Ataque y destrucción de la vivienda de la hermana Andrea Quipildor de Sara del Pueblo Tastil por parte del terrateniente Jovanovic

Movilización en apoyo al Pueblo Tastil ante el ataque del terrateniente usurpador Jovanovic.
La tensión entre los terratenientes y los Pueblos Originarios en las provincias es cada vez más intensa. Estos usurpadores devenidos en “terratenientes” nos despojaron ilegalmente de nuestros territorios a través de sucios negociados y a precios viles, y continúan perpetuando hasta nuestros días las relaciones de servidumbre y explotación de nuestros pueblos. Estos sectores reaccionarios son, la mayor de las veces, familias de renombre que están enquistadas en el poder desde los tiempos de la colonia y se encuentran íntimamente relacionados con funcionarios políticos, de la Justicia y de las fuerzas de seguridad, constituyendo poderes semi-feudales en las provincias, aliados con los monopolios mediáticos y empresariales. Cotidianamente nuestros Pueblos y comunidades deben hacer frente a estos gigantes empresarios, multinacionales, proyectos inmobiliarios y extractivos sin más que látigos, piedras, fortaleza identitaria y organización. De este modo durante tantos años hemos podido resistir los embates sobre nuestros territorios, pero es una lucha injusta y desigual.

La Comunidad "el quebracho" del Pueblo Weenhayek dufrió varios intentos de desalojo por parte de la usurpadora Monserrat Talesio.
Momentos previos al asesinato de Javier Chocobar a manos del terrateniente Amin y los ex policias Gómez y Valdivieso.
Movilización en pedido de Justicia por Javier Chocobar

La organización territorial Mapuce Tehuelche Selk'nam apoya el pedido de Justicia por Javier Chocobar

Pedido de Justicia por Javier Chocobar

El 12 de octubre de 2015 se cumplirán 6 años del asesinato de Javier Chocobar. Sus asesinos siguen libres.
Desde el ENOTPO creemos que es tiempo de que el Estado Nacional y los Estados Provinciales asuman su responsabilidad política ante estos hechos y emprendan un camino real de descolonización. Las políticas simbólicas son importantes siempre y cuando vayan acompañadas de transformaciones materiales concretas. Esto implica no solamente reconocer simbólicamente la Plurinacionalidad levantando monumentos de algunos líderes históricos y/o patriotas, sino consultarnos respecto a ello. Superarando las políticas meramente asistencialistas e indigenístas, y hacernos participes de una vez por todas (y como manda el Derecho Indígena) de las definiciones sobre políticas públicas en relación al presente y futuro de nuestros Pueblos y nuestros Territorios. Este es el único camino para salir de las acciones meramente reformistas y profundizar una real y verdadera política intercultural que transforme nuestras realidades territoriales.

Asamblea del ENOTPO en territorio del Pueblo Tolombon de la Nación Diaguita

La restitución de los Territorios Originarios es una demanda histórica que los Pueblos Originarios venimos realizando desde que el Estado Nacional avanzó sobre nuestros espacios territoriales ancestrales. Una Ley de Propiedad Comunitaria que titularice nuestros Territorios es el camino actual y constitucional para avanzar hacia la redistribución de la tierra y la reparación histórica de la violencia cometida contra nuestros Pueblos. Para ello, la participación y consulta a los Pueblos Originarios a través de nuestras instituciones es la condición necesaria para garantizar nuestra seguridad jurídica y territorial. 

Exigimos la inmediata intervención de los organismos en materia de derechos de los Pueblos Originarios y de DDHH, que asuman de una vez por todas las demandas reales de las Naciones Originarias, reconociendo al sujeto de derecho, y emprendan nuevos caminos para superar la mirada paternalista y colonialista, hacia un Estado más democrático y plural que permita avanzar en la reparación histórica y restitución de los Territorios Originarios.

¡EXIGIMOS LA INMEDIATA LIBERACIÓN DEL HERMANO CACIQUE FRANCISCO CHAILE DETENIDO ILEGALMENTE POR EL SOLO HECHO DE RECLAMAR EL TERRITORIO COMUNITARIO!

¡TITULARIZACIÓN DE LOS TERRITORIOS ORIGINARIOS CON PARTICIPACIÓN Y CONSULTA A LAS ORGANIZACIONES DE PUEBLOS ORIGINARIOS!

¡POLÍTICAS PÚBLICAS INTERCULTURALES PARA GARANTIZAR LA SEGURIDAD TERRITORIAL Y DERECHOS HUMANOS COLECTIVOS DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS!

¡POR MEMORIA, IDENTIDAD, JUSTICIA Y TERRITORIO!

Movilización del ENOTPO en el Día por la Memoria, la Verdad y la Justicia.

lunes, 6 de julio de 2015

EL TERRITORIO ES VIDA Y LA VIDA ES IRRENUNCIABLE. “MARCOS DE DISCUSIÓN PARA LA PLURINACIONALIDAD: TERRITORIO – IDENTIDAD – AUTONOMÍA”.

El debate necesario para la Plurinacionalidad



Entre los días 17 y 19 de junio, más de 300 referentes de Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios nos reunimos en Junín de los Andes, Neuquén, para reafirmar la necesidad urgente de resguardar nuestros territorios comunitarios, aquellos que nuestros hermanos y hermanas han defendido con su sangre desde la invasión europea hasta nuestros tiempos.

Junín de los Andes hoy es una localidad turística de la provincia de Neuquén, ubicada a pocos kilómetros del Volcán Lanín, conocida generalmente por sus paisajes paradisíacos y cabañas de lujo, y destino preferido de los amantes de la pesca, la naturaleza y el turismo aventura. Lo que no se dice con tanta frecuencia, es que Junín de los Andes es un lugar histórico del Territorio ancestral Mapuce (Wallmapu) ya que en el año 1885, el fortín que antecedió a dicha localidad fue escenario de la resistencia armada de los Pueblos Mapuce y Tehuelche/Günuna kuna, aún libres, contra el avance del ejército argentino de Roca y sus cómplices militares y civiles, en lo que se conoce como la “campaña del desierto”, que constituyó el primer genocidio del actual Estado Argentino.

Los lonkos Inakayal, Foyel, Sayweke, Wenchunekul, Nawel, Pichi Kurruwinka y Kumilao pelearon junto a su gente hasta el último momento, pero el ejército los contuvo. Sayweke, comprendió que era una cuestión de tiempo y entregó su lanza. Sin embargo la resistencia no terminó. Nuestros antepasados nos dejaron un legado irrenunciable de lucha por nuestra Libertad, Identidad y Territorio. Hoy los Pueblos Originarios hemos fortalecido nuestras organizaciones políticas propias y recuperamos la voz en primera persona, entendiendo que el diálogo y la palabra son las nuevas armas para la defensa de nuestros Territorios. En este camino los Pueblos Originarios hemos iniciado un diálogo intercultural con el Estado Nacional a través de nuestras organizaciones territoriales, asumiendo el desafío de participar activamente de la transformación del Estado, levantando como bandera las demandas históricas de nuestros pueblos y asumiendo el compromiso de responder al mandato colectivo de los territorios.

A lo largo de estos años de organización, hemos trabajado incansablemente sobre diversas propuestas para la implementación de políticas públicas y de participación efectivas, algunas de ellas se fueron concretando, como es el caso de la Ley 26.206 de EIB, la Ley 26160 y sus prórrogas, la inclusión del Derecho a la Comunicación con Identidad en la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual ley 26.552; la inclusión del derecho Indígena en la Reforma del Código Civil y Comercial, Art. 18 que comienza a regir en agosto de 2015; la nueva Ley Agricultura Familiar Ley 27.118. Del mismo modo hemos promovido la gestión Intercultural en el marco del Estado, que desencadena la creación de la Dirección de Pueblos Originarios en la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, la Dirección de Afirmación del Derecho Indígena en el marco del INAI y la Dirección de Pueblos Originarios en el Ministerio de Agricultura. Pasos que si bien NO SON LA REPARACIÓN HISTÓRICA, entendemos que son los caminos que debemos dar como sociedad hacia el verdadero reconocimiento de la plurinacionalidad.

En este camino, aún hay deudas por parte del Estado y de sus gobiernos, y es nuestro deber y responsabilidad como sujetos de derecho instalar en la agenda pública nuestras demandas y reclamos, como lo es una Ley que titule nuestros Territorios Comunitarios, una Ley de Consulta y Participación y la necesidad de convocar a una constituyente de Pueblos Originarios que plasme y visibilice nuestra plurinacionalidad como Estado.

La asamblea de las Organizaciones Territoriales



En la asamblea participaron delegados y autoridades de más de 29 Pueblos de todas las regiones del país, desde Tartagal (Salta) hasta Tierra del Fuego. La Confederación Mapuce de Neuquén como organización local, recibió a las restantes organizaciones con un afafan, ceremonia del Pueblo Mapuce propiciatoria para los buenos pensamientos, la hermandad y la reafirmación cultural e identitaria como pueblos preexistentes.



Las autoridades territoriales dieron apertura a la asamblea con un posicionamiento político, espiritual y filosófico sobre la trascendencia del debate sobre la titularización de los Territorios Originarios y de la importancia de este encuentro. Entre los temas e ideas expresadas, se estableció que la Ley de Propiedad Comunitaria Indígena es un proyecto en el cual está en juego el territorio y el futuro de los Pueblos Originarios en Argentina es, por lo tanto, una ley para las futuras generaciones. 

Las primeras observaciones que se realizaron a este proyecto de ley tuvieron que ver con la necesidad de participación de las Organizaciones Territoriales Indígenas en su elaboración. Se reclamó que el gobierno nacional debe garantizar el proceso adecuado de consulta. Los propios pueblos con autodeterminación deben establecer cómo se constituye esta norma: “El derecho a la Consulta es lo que nos permite ejercer este derecho a participar en las elaboraciones de la ley”. Al respecto, se dejó en claro que “esta reunión no es parte del proceso de consulta, sino que se trata de una reunión informativa”, ya que la consulta debe ser realizada respetando los tiempos de los Pueblos Originarios y “los tiempos del Estado Nacional no deben arrinconar a los Pueblos Originarios (…) La versión 2 del anteproyecto presenta a la consulta como una audiencia pública, y eso no es consulta porque sabemos que las audiencias son no vinculantes”

En este sentido, los Pueblos Originarios deben decidir cómo es el camino propio y para ello desde el ENOTPO se desarrolló un Protocolo de Consulta Previa Libre e Informada que establece los principios y procedimientos adecuados. Si el Estado quiere avanzar, debe garantizar el debido proceso de consulta, dando los tiempos necesarios, junto con los recursos necesarios: económicos, logísticos, administrativos y técnicos para la realización de todas las asambleas que se deban hacer.

Sumado a esto, se observó que “el borrador de la ley no hace mención a la necesidad de tierras aptas y suficientes, tal como lo establece el Artículo 75 Inciso 17 de la Constitución Nacional. Hay que tener en cuenta que varios Pueblos Originarios estamos reducidos a espacios pequeños en los márgenes de los poblados o arrinconados en el territorio a vivir en pedrerías”

Además se planteó que el anteproyecto habla de “tierra” y “hábitat”, que no son conceptos relacionados con los Pueblos Originarios. El sujeto de derecho es el Pueblo y eso no queda claro en el borrador de propuesta en lo que respecta al territorio y la relación que se establece con el mismo y su significación. Dicha relación la define cada Pueblo de acuerdo a su cultura y forma de vida. La ley debe incorporar la noción de “tierras aptas y suficientes”, tal como lo establece la Constitución Nacional. Asimismo se debe debatir sobre el tema bienes naturales y explotaciones a gran escala de esos recursos, para construir un nuevo modelo de desarrollo que incorpore la filosofía de los Pueblos Originarios de reciprocidad y complementariedad en relación con el Territorio.

Se concluyó que el proyecto de ley que se está intentando impulsar no representa los intereses de los Pueblos Originarios. Por lo tanto los Pueblos Originarios debemos estar movilizados y ocupados sobre qué es lo que quiere hacer el Congreso Nacional con el territorio y el derecho indígena. “Sabemos que la ley no va a garantizar automáticamente la propiedad comunitaria y los territorios. Lo único que lo va a garantizar es la unión y la lucha. Entonces debemos juntar la fuerza de todos para tener cada vez mayor capacidad de resistencia”.

Participaron de la asamblea autoridades, delegados y miembros de las organizaciones territoriales: Confederación Mapuce de Neuquén, Coordinadora del Parlamento Mapuce de Rio Negro, Unión de los Pueblos de la Nación Diaguita - UPNDS (Salta), Pueblo Tolombón de la Nación Diaguita (valle de Choromoros, Tucuman), Ocastafe (Santa Fe), Organización Identidad Territorial Malalweche de Mendoza, Organización Ranquel Mapuce de la Pampa, Agrupación de Comunidades Indígenas dto. San Martín (Salta), Agrupación Comunidades Wichi Ruta 81, 34, 53 - Embarcación (Salta), Organización Mapuche- Tehuelche Nor Feleal (cordillera, meseta y zona sur, Chubut), Consejo del Pueblo Tastil. Quebrada del Toro (Salta), Org. Territorial Huarpe Pinkanta (Mendoza, San Juan y San Luis), OTPOC (Córdoba), Organización Identidad Territorial Chew Mapu Selk (Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego), Pueblo Lule - Comunidad Las Costas (Salta), Red de Comunidades del Pueblo Atacama (Salta), Consejo Indio Pueblo Nación Charrua (Entre Ríos), Org. Pueblo Chorote (Salta), Org. Territorial Mapuce Tehuelche de Cushamen, Org. del Pueblo Weenayek Embarcación (Salta), Org Mapuce de San Rafael (Mendoza), Org. de la Nación Guaraní de Corrientes, entre otros espacios territoriales.



Ejercicio de diálogo intercultural con el Estado




En virtud del diálogo intercultural que proponemos como base para la transformación del Estado monocultural hacia un Estado Plurinacional, se convocó al segundo día del debate al Presidente del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), Daniel Fernández, quién expresó la voluntad del INAI de participar de manera activa para dar respuestas y evacuar inquietudes sobre el anteproyecto de Propiedad Comunitaria Indígena.

Fernández planteó que “a partir de agosto comienza a regir el Nuevo Código Civil. En el Código Civil de Vélez Sarsfield omitió a los Pueblos Originarios y a la propiedad comunitaria. El código civil rige para todo el país y para todas las provincias, y esto es lo importante. El Nuevo Código dice que se va a hacer una ley que va a instrumentalizar la propiedad comunitaria indígena. Y esta Ley va a ser parte del código civil, por lo que deberá ser aplicado en todas las provincias”

Además agregó que se está dialogando con las provincias para explicar el proyecto de ley que se va a llevar adelante buscando establecer consensos básicos. Del mismo modo, se está trabajando con la Secretaría de Minería, con la mesa nacional de CPI, y con otros actores e instituciones involucrados. Se aspira a que el proyecto tenga entrada en el mes de agosto cuando comienza a regir el Nuevo Código Civil, y que la ley sea aprobada este mismo año.

El presidente del INAI afirmó que “se va a hacer la consulta a los Pueblos Originarios y no va a tener sanción si no hay consulta (…) estamos en una etapa de elaboración. Esta jornada es informativa y la relación no se agota acá. Se van a hacer más de estas jornadas y luego un proceso de consulta”.

Desde las organizaciones se manifestó la preocupación por el relevamiento ya que el mismo no permite a los Pueblos Originarios y sus comunidades acceder a tierras aptas y suficientes para su desarrollo tal como lo estipula la Constitución Nacional. Se aclara que si bien en el contexto en el que se aprobó la Ley 26.160 se buscaba principalmente frenar la ola de desalojos que sufrían los Pueblos Originarios, en el nuevo contexto político y social que estamos viviendo, eso no es suficiente ni se corresponde con el texto de la Constitución que establece que deben garantizarse tierras aptas y suficientes. Ante esta situación Fernández aclaró que “no trajimos el texto para decir esto se aprueba sí o sí. Es un borrador. Puede ser modificado, enriquecido. Como dijeron acá, otras tierras aptas y suficientes tienen que estar y estamos de acuerdo a que se amplíe y que forme parte de un título dentro de la ley”. Además, “necesitamos articular con las provincias para llegar a una ley nacional que obligue a las provincias. El Código Civil dice que se deben adecuar los registros inmobiliarios de las provincias al nuevo código”.

Fernández enfatizó que el Gobierno Nacional y el INAI creen firmemente en el diálogo, y uno de los ámbitos más importantes para este diálogo es el espacio de las Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios, afirmando la voluntad política y se comprometió, en nombre del Estado Nacional, generar las condiciones para que los Pueblos Originarios contemos con la debida participación en la elaboración del proyecto de Ley de Propiedad Comunitaria Indígena. La propuesta es entonces seguir el diálogo pero también establecer definiciones con equipos de trabajo. Estas jornadas recorrerán los territorios dando marcos para la discusión y consensos necesarios para las políticas públicas interculturales.

La propuesta del ENOTPO para la Ley de titularización de los Territorios Originarios


En el año 2010, a partir de la lucha y organización de los Pueblos Originarios, el Gobierno Nacional ha impulsado un anteproyecto de Ley de Propiedad Comunitaria Indígena y en los últimos meses se ha retomado la discusión, en la cual los Pueblos Originarios debemos ser los actores principales. Es por ello que, desde el ENOTPO se establecieron 9 puntos de carácter irrenunciable que una ley de titularización de nuestros Territorios debe garantizar:

1. Cualquier actividad que se desarrolle en territorio indígena deberá ser sometida a un proceso de consulta y al consentimiento libre previo e informado.

2. La posesión tradicional será definida por cada pueblo en relación con su cosmovisión.

3. Dentro del marco territorial los pueblos originarios tenemos derecho a ejercer autónomamente el uso, la posesión, la administración de nuestros territorios y bienes naturales para el desarrollo del buen vivir.

4. El proceso de auto-reconocimiento de la identidad de los pueblos originarios es dinámico, permanente y ascendente, es por ello que toda norma debe contemplar esta realidad y bajo ningún motivo podrá limitar la recuperación de la identidad, y por ende la incorporación permanente de territorios al instituto de la propiedad comunitaria indígena.

5. La constitución establece la obligación del estado de entregar tierras aptas y suficientes para el desarrollo de los pueblos originarios. Estas tierras deberán incluirse en el instituto de la propiedad comunitaria indígena.

6. La forma en que debe realizarse la titulación debe ser mediante procedimientos sencillos y se debe garantizar su gratuidad.

7. Los pueblos originarios tenemos derecho a definir desde nuestra propia cosmovisión las formas de uso, aprovechamiento, posesión y administración del territorio y sus recursos.

8. El sujeto de derecho es el pueblo originario a través de sus instituciones representativas, sus organizaciones y comunidades.

9. La propiedad comunitaria indígena es parte de la integralidad territorial de un pueblo originario determinado. Debe respetarse el territorio ancestral y tradicional.

La lucha por el territorio es histórica y tiene como antecedentes recientes, el caso de recuperación del territorio Mapuce de Pulmarí en Neuquén, la lucha del Pueblo Mapuce contra Benetton en la patagonia, el asesinato de Javier Chocobar por la defensa del territorio del Pueblo Chuschagasta, la resistencia de la Nación Diaguita en Las pailas provincia de Salta, la recuperación del espacio territorial de la comunidad Pencolé del Pueblo Pilagá en Formosa, la lucha del Pueblo Tastil contra el Rally Dakar y la patrimonialización de su territorio ancestral, la resistencia del pueblo Colalao ante los desalojos en Montebello, la lucha de los pueblos Wichi, Chorote, Qom, Guaraní, Weenhayek, Iogys, Chane, Chulupi en la zona Tartagal contra los desmontes ilegales, entre otros. 

El reconocimiento de los territorios ancestrales es la base para el fortalecimiento de nuestra identidad y la seguridad jurídica es fundamental para afianzar nuestros derechos y dejar a las futuras generaciones una base para una nueva sociedad donde puedan desarrollarse desde nuestras propias cosmovisiones, en los Territorios donde estamos desde siempre.

Desde el Encuentro Nacional de Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios convocamos a los actores políticos que conducen los destinos del país a tener el coraje y la decisión política necesaria para dar el debate y profundizar las transformaciones que necesitamos como sociedad. Esperamos que estén a la altura de este momento histórico que vive la región, para dar un paso real de reivindicación identitaria y cultural hacia un Estado Plurinacional. La historia así lo juzgará.